LA HISTORIA NO ES EL PASADO, PORQUE TRANSCURRE HOY .
El Museo Itinerante del Barrio de la Refinería, las Jornadas de Cronistas e Historiadores Barriales y el Museo Virtual están declarados de Interés Cultural por la Secretaría de Cultura de la Municipalidad de Rosario y el Honorable Concejo Municipal.
Personería Jurídica Otorgada por Resolución Nº325 del año 2010.
SE MUESTRAN 5 ARTICULOS POR PAGINA, Y SE PUBLICA UNO NUEVO CADA MES. Para comunicarse:
BANCO DE IMAGENES: angita1845@yahoo.com.ar

domingo, 17 de octubre de 2010

SE REALIZARON LAS V JORNADAS DE HISTORIADORES Y CRONISTAS BARRIALES

Se realizaron el viernes y sábado pasados  las V as. Jornadas de Cronistas e Historiadores Barriales.
Participaron cien asistentes, y con ventinueve ponencias, este encuentro ha generado, una vez más, amistades, muchos proyectos, ideas compartidas y cierto agradable ( y tantas veces buscado) espíritu de camaradería y compañerismo.
Por supuesto, mención aparte merecen las ponencias, las que fueron variadas y de calidad.
Sin detallarlas, se pudo comprobar que iban desde lo científico a lo pasional; abarcaron la denuncia ante la desaparición del patrimonio colectivo, la consideración de la fotografía como testimonio, como estilo de vida y como documento; las anécdotas y las propuestas de trabajo sobre el acervo fotográfico colectivo.
Las edades fueron variadas también. Lejos de pensar en un grupo de nostálgicos mayores o coleccionistas eruditos, se reunieron personas de treinta y de ochenta años; universitarios y aficionados, académicos y vecinos, argentinos y extranjeros, todos igualados por el interés y el significado de las viejas fotos.
Resultó interesante el intento frecuente de ir más allá de la imagen, evitando quedarse en el simple "trabajo de lupa", contrastando contextos, épocas y hábitos, interpretando la complejidad de la fotografía. Así, se dio significación a imagenes que, a simple vista, nada tenían de excepcional, pero que guardaban un importante trasfondo social.  
Las ponencias tuvieron una investigación rigurosa y una cuidadosa realización, lo que además de ser una carta de presentación del expositor, halaga a los organizadores, ya que supone que las Jornadas merecen trabajos cuidados, tanto en su contenido y como en su forma.
Como siempre, el personal del Centro Cultural Cine Lumiere "puso el cuerpo", comprometíéndose en arreglar cosas que parecían irreparables, anticipándose a los problemas y brindando una inigualable atención a los participantes.
Si bien la organización -modestia aparte, pues el Museo participó en ella- fue más que correcta, se pudieron concebir (a pesar de la inevitable fatiga) algunas mejoras para la próxima edición, optimizando ciertas tendencias que nos parecieron favorables.
Por parte del Cine Lumiere, se vio la necesidad de ampliar y optimizar los sistemas informáticos disponibles, lo que brindará mayor accesiblidad y seguridad en la faz técnica, ya que la variedad de prouestas de los historiadores y cronistas trascienden la simplicidad de los primeros encuentros de vecinos, muchos de los cuales ya necesitan de tecnología renovada.
Otra de las mejoras, pensadas por el Museo, parte de la idea original de estos encuentros: La Historia como Calidad de Vida.

A partir de ese concepto que entendemos necesario recordar, el Museo tratará de jerarquizar los espacios colectivos de las Jornadas,  entiéndanse breaks o pausas para el café, lugares de charla e intercambio, modos de acceso a datos, exposiciones, objetos para ilustrar o reflexionar acerca de las Jornadas, etcétera.
Sabemos que no se tratará simplemente de extender por más tiempo el café y los almuerzos, sino de dar calidad y sobre todo entidad a los momentos de socialización que, paradójicamente, es algo muy pedido. Incluso más que los escasos 15 minutos de ponencia... los participantes pedían 15 minutos más de intercambio. Trataremos que sean minutos de calidad, agradables y útiles para todos.
Terminadas las Jornadas, fue interesante ver que la gente se demoraba en las despedidas, charlando, conociéndose, lo que hizo ver la necesidad de estos espacios comunes, simples pero provechosos. Lejos de retirarse una vez realizada las Jornadas, la mayoría de los participantes se quedaban departiendo, casi buscando excusas para charlar, a pesar de la hora de cierre y el cansancio físico de dos días de participación.
Mediante esta reflexión veremos, en forma conjunta con el Centro Cultural Cine Lumiere, cómo mejorar y recualificar los momentos más placenteros de las Jornadas, ese tiempo en el que todos nos encontramos, hablamos y planificamos sobre los temas que más nos gustan: la historia y el barrio.

7 comentarios:

JUAN dijo...

fELICITACIONES.
LES DEJO 10 SUGERENCIAS:
1- ES CIERTO LO DE LOS ESPACIOS PARA TODOS, SERIA INTERESANTE UN LUGAR PARA CHARLAR.
2- cREO QUE SE DEBERIA HABILITAR UN PANEL PARA DEBATE, DE UNA HORA
3- LAS PERSONAS NO DEBERIAN RETIRARCE UNA VEZ HECHA SU PONENCIA, ES UNA FALTA DE RESPETO
4- eSTARIA BUENO UN LISTADO DE MAIL PARA COMPARTIR, POR ESPECIALIDAD
5- LAS JORNADAS SON CORTAS, PERO AGOTAN A LA GENTE, PODRIA REGULARSE MEJOR EL TIEMPO CON ALGUNA ACTIVIDAD LUDICA OPTATIVA (CONCIERTO, CORO, TEATRO)
6- YA ES NECESARIO
UN ESPOSNSOREO QUE PERMITA GASTAR EN POSTALES, FOTOS, DVD, PUBLICIDAD PARA QUE SE CONOZCA Y LA GENTE SE LLEVE
7- EL ETUR NO SABE NADA DE ESTO, HAY QUE LLEVARLE LA PROPUESTA!
8- NO HUBO ESTUDIANTES DE FACULTAD DOCENTES, NI MUSOELOGIA, HAY QUE DARLES ALGUN BENEFICIO O NO VAN A IR.
9- FUE LA-MEN-TA-BLE LA ASUSENCIA DE HORACIO RIOS.
10- TIENEN UN PEFIL MUY BAJO, SOBR E TODO EL MUSEO, HAY QUE ELEVARLO.

Anónimo dijo...

gracias por tus sugerencias ¡¡ las tendremos muy en cuenta¡¡¡ es más , ya lo estamos charlando,con respecto al público en esos estás equivocado, la mayoría eran estudiantes y docentes de la Facultad, el promedio de edad de los participantes era de entre los 25 y los 45 años , muy poca gente grande, cosa que nos es común en nuestras jornadas, y que nos llenó de alegría porque lo que buscamos es la participación de la gente jóven, que se involucren, participen y nos ayuden, como vos, aunque sea con sus comentarios tan ricos.
Un abrazo
Angela
Museo de Refinería

Anónimo dijo...

gracias por tus sugerencias ¡¡ las tendremos muy en cuenta¡¡¡ es más , ya lo estamos charlando,con respecto al público en esos estás equivocado, la mayoría eran estudiantes y docentes de la Facultad, el promedio de edad de los participantes era de entre los 25 y los 45 años , muy poca gente grande, cosa que nos es común en nuestras jornadas, y que nos llenó de alegría porque lo que buscamos es la participación de la gente jóven, que se involucren, participen y nos ayuden, como vos, aunque sea con sus comentarios tan ricos.
Un abrazo
Angela
Museo de Refinería

Anónimo dijo...

estoy d acuerdo con Juan, la propuesta d difundir mejor estas actividades q sean solventada por esponsors pribados la municipalidad nunca da nada a nadie los proyectos se los comen ellos solos.
Las jornadas deben ser para los vesinos, no para q los funsionarios se lleben el brillo y los excitos, sino para q la gente aprenda y salga contenta.

Anónimo dijo...

mi duda es ¿ vos estuviste en las jornadas??', por que el Centro Lumiere participó activamente, poniendo toda su infraestructura, personal, el brindis y el café que se sirvió durante los dos días... no tenemos que ser desagradecidos, ni tampoco hablar por hablar... seamos constructivos, porque a veces los Sponsor son buenos pero también exigen cosas y no dan la liubertad que se necesita para hacer estos eventos a ellos tambien les gusta figurar y como¡¡¡.. bahh... digo...

Anónimo dijo...

no fue mi intension ofender, es que conosoc a la gente mun cipal y lo q hiso el Llumiere es una eccepcion, la gente de cultura de los ditritos se lleva la plata y no se ven resultaods.
Los felisito porque han conceguido que la municipalidad aporte algo para llevar bienestar a los vecino s de rosario!!!!!!!!!!!!!!!!!

LA COMISION DEL MUSEO dijo...

Tal vez tengas razón, pero poner a todos en la misma bolsa no suma.
Tal vez tengas razón, y sea la excepción a la regla, pero nos consta que la gente del Lumiere se ha comportado con total corrección, excediendo lo que su trabajo municipal le exige, y aportando ideas, soluciones y sobre todo el tiempo personal, incluso aunque no hayan estado obligados.
Sabemos que no siempre ocurre esto, pero decir "la municipalidad" implica realiaddes no uniformes.
Hasta ahora, no podemos decir que la municipaldad nos haya dejado de lado, pero en el caso de existir casos de "abandono municipal" o falencias institucionales, sería importante y útil poner al Lumiere como ejemplo, tomándolo positivamente.
Saludos y gracias por tu aporte.

Gustavo, del Museo.